Por JOSH BUICE – Traducido del inglés. Artículo original de G3 Ministries
El 8 de febrero, un culto regular en la Universidad de Asbury desencadenó el comienzo de una reunión que ha continuado durante 13 días. Se le ha llamado un verdadero movimiento del Espíritu Santo y un auténtico avivamiento. Recientemente, el liderazgo en Asbury ha anunciado un plan para poner fin al movimiento y volver a los horarios normales de la vida en el campus que han sido completamente ininterrumpidos durante las últimas dos semanas.
La gente ha estado llenando el auditorio e inundando el campus de Asbury durante las últimas dos semanas. Muchas personas, incluyendo pastores de iglesias de todas partes están peregrinando a Asbury en un intento de atrapar los vientos de avivamiento y llevarlos de vuelta a sus iglesias locales. El Espíritu de Dios no es una fuerza o algún alboroto contagioso que pueda ser atrapado y reubicado en la vida de otra iglesia. El Espíritu de Dios es Dios y se mueve como quiere para cumplir el propósito de la gloria de Dios. Además, el Espíritu Santo es omnipresente y no necesita ser perseguido para experimentarlo.
Lo que está sucediendo en Asbury ha sido elogiado y criticado. Antes de condenar la crítica de Asbury, recuerde que la crítica sana puede ser algo bueno. Es saludable para el pueblo de Dios y si se hace con los motivos adecuados y a través de la lente de las Escrituras como nuestra autoridad –expone el error y prueba los espíritus fielmente– (1 Juan 4:1).
Cuando estudiamos la historia, vemos algunos movimientos de Dios verdaderamente extraordinarios. En el libro de los Hechos, vemos que Dios se mueve de una manera inusual en Pentecostés (Hechos 2) resultando en una explosión de gracia salvadora donde aproximadamente 3.000 almas fueron salvadas. Después de un largo periodo de oscuridad, hubo un movimiento en 1517 que resultó en la Reforma Protestante que tuvo frutos duraderos que permanecen hasta el día de hoy. Produjo las Escrituras en el lenguaje del hombre común y una sólida defensa de la justificación sólo por la fe. R.C. Sproul explica:
La Reforma no fue simplemente un Gran Despertar; fue el Mayor Despertar al verdadero Evangelio desde la Era Apostólica.
Desde 1734 hasta aproximadamente 1749 hubo lo que se ha llamado el Gran Despertar en Nueva Inglaterra. Los puritanos llegaron a Nueva Inglaterra en el siglo XVII. Eran mayoritariamente calvinistas y posmilenaristas en su visión de la escatología. Unos 100 años más tarde, hubo otro movimiento discutible conocido como el Segundo Gran Despertar. La mayoría de los estudiantes de la historia de la iglesia estarían de acuerdo en que América no ha visto otro movimiento único y extraordinario de Dios desde este período temprano en la historia americana.
Esto no impide que la gente utilice el término avivamiento para reclamar una bendición extraordinaria o la presencia única de Dios. Esto sucedió con el movimiento de la calle Azusa 1906-1915, el movimiento de Brownsville 1995-2000, y ahora el movimiento de la Universidad de Asbury. Cada uno de estos movimientos son etiquetados como avivamientos. Curiosamente, este no es un territorio nuevo para Asbury. De acuerdo con su sitio web, han hecho una crónica de los avivamientos que han tenido lugar en su campus desde 1970.
Mucha gente se muestra escéptica cuando los estudiantes de Asbury publican mensajes en Twitter sobre estudiantes queer que dirigen los servicios de avivamiento.
Otro individuo publicó un vídeo de un supuesto exorcismo que tenía lugar en pleno auditorio. No pude evitar fijarme en la tranquilidad con la que la gente se paseaba cuando supuestamente los demonios gritaban desde el interior del cuerpo de una persona en el auditorio. Añade a esos informes el hecho de que falsos maestros como Todd Bentley pasaron unos días allí y deliraba sobre su experiencia afirmando en las redes sociales: «¡El Espíritu Santo permanece y sientes ondas tangibles de su presencia!» El movimiento Asbury parece dar frutos corruptos en varios niveles.
El propósito de este artículo no es debatir los detalles del movimiento de Asbury en relación con las influencias carismáticas o la diferencia entre despertar, reforma y avivamiento. Creo que esas conversaciones son necesarias, pero ese no es mi objetivo en este artículo. La verdadera cuestión en la que quiero centrarme en este artículo es la siguiente: ¿Qué pruebas tenemos, desde la perspectiva de la iglesia local, de que este momento es un auténtico avivamiento? Preguntado de otra manera: ¿Una bendición extraordinaria de Dios alejaría a la gente de lo ordinario?
El avivamiento fortalece a la iglesia local ordinaria
Inmediatamente después del movimiento del Espíritu Santo en Hechos 2, el Espíritu de Dios guió a la gente a reunirse de manera ordenada y participar en la adoración, el discipulado y las misiones. El énfasis se puso en la reunión de la iglesia local para el culto. El resto del Nuevo Testamento se centra en la organización del pueblo de Dios que se reúne de diferentes orígenes, etnias y estatus socioeconómico en Jesucristo. Tanto judíos como gentiles se unen en el vínculo del Evangelio.
Cualquier movimiento que dice ser de Dios que aleja a la gente de la iglesia local y descuida los medios ordinarios de gracia es un falso avivamiento. Hay muchas maneras diferentes de descuidar la iglesia local, pero me gustaría enfocarme en dos específicas.
1-Asamblea Descuidada
La iglesia es el plan de Dios para el cristiano. Como presidente de G3 Ministries, realmente me encanta lo que sucede en una conferencia o en el servicio de una capilla. He tenido la oportunidad de predicar en varios escenarios desde grandes conferencias hasta servicios íntimos de capilla en campus universitarios y en cada escenario hay una oportunidad única de adorar con el pueblo de Dios. Sin embargo, eso no es sostenible. No es el plan de Dios para mí permanecer comprometido en una conferencia o en un servicio de capilla y descuidar la iglesia local, independientemente de lo poderosa que pueda ser la predicación o el canto en el evento. Las conferencias y las instituciones educativas cristianas existen con el propósito de fortalecer las iglesias locales para la gloria de Dios.
Cuando la iglesia se niega a reunirse fielmente afecta la salud de la iglesia como un todo. Considere las palabras de Hebreos 10:24-25. La iglesia es más que ladrillos y cemento. El cuerpo de la iglesia se necesita mutuamente con el propósito de animarse y estimularse unos a otros al amor y a las buenas obras. Esto simplemente no es posible cuando la iglesia es descuidada. ¿A qué iglesia asisten estos estudiantes? ¿Son miembros de una iglesia local? ¿Y los miembros de la facultad? ¿Están sufriendo todas las iglesias locales cercanas como resultado de lo que está sucediendo en el campus de Asbury? Piense en la pareja de 75 años de edad, con el pelo canoso,sentado en un banco en un auditorio –en gran parte vacío– a pocos kilómetros por la calle de Asbury. ¿Cómo les está ayudando Asbury?
2-Predicación Descuidada
El propósito del Espíritu de Dios es llevarnos a Cristo (Juan 16:14). La forma en que Dios hace esto es a través de la predicación de las Escrituras. Pablo lo dejó claro en 1 Corintios 1:18, «Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden, pero a los que se salvan es poder de Dios». En otras palabras, el poder de Dios se manifiesta en la predicación del Evangelio, no simplemente en un grupo de personas exaltadas con cantos emotivos, bailes y gritos.
Los movimientos extraordinarios del poder de Dios fueron históricamente dirigidos por una predicación fiel. Cuando se descuida la predicación, la gente sufrirá confusión y se dejará llevar por las emociones y opiniones de la gente. Un pastor local que vive a 20 minutos del campus de Asbury decidió visitar el campus recientemente. El pastor Victor Sholar escribió sobre algunas de sus preocupaciones. Afirmó lo siguiente:
Porque cuando leas el libro de los Hechos, notarás que el poder del Espíritu siempre se manifestaba en conexión con la predicación de Cristo. En otras palabras, cuando se predicaba a Jesús, el Espíritu se movía. Cuando Cristo era el foco central, el Espíritu actuaba. Por lo tanto, no es la música la que produce avivamientos, sino la predicación de Cristo.
Una de las características de Asbury es que es más espontánea y dirigida por los estudiantes. No se predica mucho. El liderazgo de Asbury ha estado facilitando y organizando la locura, pero esto ha sido principalmente dirigido por los estudiantes y como resultado, la sabiduría de la sala se ve muy disminuida cuando tienes estudiantes reunidos para cantar y orar. Esto no siempre es malo. Seamos honestos, necesitamos grupos de estudiantes de la Generación Z que se reúnan para estudiar la Biblia, orar y cantar, pero debemos buscar el equilibrio y la madurez. Sin santos mayores que dirijan y predicadores fieles que expongan las Escrituras, el movimiento carece de sabiduría.
Debemos recordar siempre que la doctrina importa. Una predicación doctrinal sólida produce un cambio genuino en las personas y al final del día, independientemente de su definición de avivamiento, eso es lo que necesitamos. Necesitamos que nuestras mentes se renueven, que nuestros corazones cambien y que nuestras emociones se revisen. Esto sucede a través de la predicación fiel. Cuando Pedro y los demás salieron del aposento alto en Pentecostés y salieron a las calles, Pedro no reunió la atención de todos y dijo: «Oigan todos, vamos a cantar algunas canciones y a orar juntos y a compartir testimonios». Pedro se puso de pie y predicó un sermón audaz y doctrinalmente rico que resultó en el derramamiento del Espíritu y la salvación de 3.000 personas.
Ese mismo patrón ha continuado a lo largo de la historia de la Iglesia. Cuando se revisa la historia de la iglesia, es obvio que cuando la predicación disminuía, resultaba en una temporada de oscuridad. Cuando la predicación fue fuerte y audaz, resultó en gran luz y salud entre el pueblo de Dios. La Reforma Protestante fue provocada por un compromiso con la predicación bíblica robusta.
Los movimientos extraordinarios de Dios dirigen a la gente hacia lo ordinario
Con demasiada frecuencia asistimos a conferencias y leemos libros que agitan nuestras emociones y nos hacen anhelar lo extraordinario. Se nos enseña a ser radicales o a estar desatados o a tener pasión por Dios y hay conferencias y libros que están diseñados para encender esta emoción en tu alma para servir a Dios. ¿Debería la vida cristiana centrarse en la búsqueda de lo extraordinario o deberíamos buscar algo más ordinario?
La iglesia local está diseñada para ministrar a las necesidades del pueblo de Dios a través de lo que llamamos los medios ordinarios de gracia. La Confesión de Fe Bautista de Londres de 1689 (capítulo 14, párrafo 1) dice lo siguiente:
La gracia de la fe, por la cual los elegidos son capacitados para creer para la salvación de sus almas, es la obra del Espíritu de Cristo en sus corazones, y es obrada ordinariamente por el ministerio de la Palabra; por la cual también, y por la administración del bautismo y la cena del Señor, la oración y otros medios señalados por Dios, es aumentada y fortalecida. ( 2 Corintios 4:13; Efesios 2:8; Romanos 10:14, 17; Lucas 17:5; 1 Pedro 2:2; Hechos 20:32)
La funcionalidad ordinaria de la iglesia local con ancianos ordinarios (no predicadores estrella de rock) está diseñada por Dios con el propósito de fortalecer las almas y hacer que seamos más conformes a la imagen de Dios que a la imagen de este presente mundo malvado.
Una vez más, hay que señalar que no es a través de los medios gratiae (medios de gracia) que una persona gana la salvación de ninguna manera. Es a través del ministerio de la Palabra que la gracia viene (Rom. 10:17). Asimismo, hay que señalar que una vez que una persona se convierte, la gracia es necesaria a diario. La gracia de Dios no es un evento de una sola vez, sino una necesidad diaria desde el punto de conversión hasta que todos estemos en la presencia de Cristo. Por lo tanto, es a través del ministerio de la Palabra, las ordenanzas y la oración que el cristiano continúa siendo fortalecido en la gracia de Dios.
La iglesia de Jesucristo debería estar apuntando en la dirección de Tito 2 en vez de Hechos 2. Dios no ha prometido que ocurrirá otro movimiento de Hechos 2 ni la iglesia debe apuntar en esa dirección. Lo que la iglesia necesita hoy es un discipulado genuino que produzca perseverancia fiel y contentamiento en la piedad a través de la vida ordinaria de la iglesia local. La iglesia no debe estar buscando una reunión juvenil perpetua llena de alta energía, arrebatos emocionales crudos y adoración desordenada. Ese no es el plan de Dios para su iglesia.
Pentecostés no condujo a la iglesia hacia Pentecostés 2.0. El Espíritu guía a la iglesia hacia una adoración ordenada, un discipulado serio y una evangelización fiel. La iglesia nunca debe ser percibida como un mega complejo eclesiástico1La expresión original en inglés es «Six Flags Over Jesus» que hace alusión a cualquier megacomplejo eclesiástico de varios edificios. Normalmente añaden otro edificio (o atracción) en cualquier momento para hacerlo más sensacional.. Tristemente, demasiados jóvenes crecen en iglesias locales y ministerios universitarios que les enseñan a buscar una iglesia que se parezca más a una reunión para animar a Cristo que a un servicio de adoración bíblica.
El Espíritu de Dios nunca descuida la iglesia local, y si estamos siendo guiados por el Espíritu Santo nuestro compromiso con la iglesia local no disminuirá. El Espíritu Santo llevará al pueblo de Dios a estar satisfecho con la forma en que el Espíritu de Dios obra en nuestros corazones y vidas a través de los medios ordinarios de gracia.
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